¿Por qué llevamos el nombre de  Ryszard Kapuściński?

¿Por qué llevamos el nombre de  Ryszard Kapuściński?

Retomamos el nombre de Ryszard Kapuściński por ser autor de una obra que define el perfil más alto del comunicador pues, destaca como periodista, como reportero y como escritor, y su obra da cuenta de una noción rica y compleja de Historia.

Su obra es valiosa desde lo literario, pues su trabajo no sólo recupera versiones imprescindibles para entender los sucesos de los lugares a los que acude, sino que además sus relatos involucran un acercamiento tal que muestra los dramas y conflictos humanos, sin dejar de mirar el sufrimiento, la crueldad y la compasión.

Kapuściński planteó la necesidad de un periodismo que se desprenda de los propios intereses, las posturas ideológicas, las creencias y las cobardías personales para poder ser testigo y revelador de los grandes procesos históricos humanos.

Por ello, considerando la enorme variedad de acercamientos que la obra de este autor es capaz de producir, y que abarca varias disciplinas e incluso cruza de una a otra, decidimos tomar su nombre como un núcleo del cual se implican áreas hacia las que desea consolidarse esta “Escuela”; áreas como Literatura, Periodismo, Historia, Antropología, Comunicación, Filosofía, entre otras.

 

Semblanza

Ryszard Kapuściński (1932-2007) es considerado uno de los periodistas más importantes y controvertidos del siglo XX. Corresponsal de guerra, cronista, catedrático en diferentes universidades, viajero y escritor; autor de poemas, ensayos y novelas, entre las que destacan Viajes con Heródoto, El imperio, Ébano, entre otras.

Inició en el ámbito literario con apenas diecisiete años; la revista Hoy y Mañana fue testigo de sus tempranos quehaceres de escritura. Se graduó en Historia en la Universidad de Varsovia. Comenzó su carrera periodística en el diario Bandera de la Juventud. En 1968, fue nombrado corresponsal de la Agencia de Prensa Polaca en el extranjero; cubrió varios países de África, Latinoamérica y Asia, su oficio le permitió compaginar con creces la generación de obra.

Su trabajo literario y periodístico lo hicieron merecedor de numerosos honores y premios, como el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en 2003, nombrado miembro de la Academia Europea de las Ciencias y las Artes, y le fueron entregados varios doctorados Honoris Causa por numerosas universidades.

Según en el texto La evolución ideológica de Ryszard Kapuściński a la luz de su obra, el autor “se adscribe a la llamada literatura faktu (una traducción literal sería “literatura de un hecho”, casi como el término inglés faction) que en castellano se denomina periodismo literario”. Al respecto, una marca esencial que apropió altamente Kapuściński es “el compromiso con los vulnerables, el uso de técnicas literarias como alegoría y la lucha por un ideal, mostración (modo periodístico de hacer que el lector se olvide de quién le cuenta y que lo que importa es hacerle ver una realidad).

Dice Kapuściński en El mundo de hoy “Aquella experiencia (se refiere al periodismo) me hizo ver que escribir era arriesgarse, y que, en el fondo, no importaba tanto el hecho en sí de que se publicara un trabajo, como las consecuencias que se seguían. Cuando uno opta por describir la realidad, su escritura influye sobre esa realidad.”

En Kapuściński. Una biografía literaria, Beata Nowacka y Zygmunt Ziątek señalan que “Kapuscinski se convirtió en vida en un mito, una figura intocable, un maestro cuyas enseñanzas corrían el riesgo de ser tan malinterpretadas como plagiadas por ejércitos de epígonos, discípulos e imitadores, la muerte no ha hecho más que alargar la leyenda.”